La palabra toloache, proviene de toloatzin, que en náhuatl significa “cabeza inclinada”, que hace referencia a la inclinación que presenta la flor de esta planta. Toluca, abundó, significa “lugar donde está el dios Tolotzin”.
Se cree que un té logra que una persona se enamore irremediablemente de otra, pero lo único que provoca son daños neurológicos, pasajeros o permanentes.
Aquí, como en la India y en Europa ha estado relacionada siempre con la brujería o con los chamanes. En el viejo continente se dice que es una de las hierbas que permiten viajar a otros mundos o volar, y por esta misma razón la emplean los indígenas en México.
El toloache, y en general las daturas, producen desorientación, angustia, falta de concentración, pensamiento incoherente, y no se distingue entre realidad y fantasía.
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